Tiempos de voto,...tiempos en los que
nos damos cuenta que la estructura de la democracia tiene muchas fisuras, que
hasta en los cimientos del edificio democrático hay rajaduras que atentan
contra la estabilidad y el equilibrio mismo del sistema. Vemos que la
corrupción está en los entornos y ámbitos del Poder, pero es que siempre estuvo
ahí, ese fue el camino por el que han llegado a semejante estructura, está
pasando en la mayoría de los países.
Aquellas primeras piedras democráticas que se pusieron, se
hicieron sobre tierras yermas, tierras baldías, tierras desbastadas. Porque
venimos de épocas donde solo existían los poderes supremos, aquellos que eran
legitimados por dios según los mismos benefactores. Todo empezó en tiempos de
Zares, Sha, Kaiser, Emperadores, Reyes, Imperios, el mundo se repartía en
porciones pero eran muy pocos los que asistían a sus banquetes,...luego
vinieron las revoluciones, luego los pactos, luego tiempos fértiles en algunos
casos, y mas tarde comenzaron otra vez las asociaciones ilícitas que hasta
terminaron asociándose en las injusticias, siempre, obviamente en nombre del
pueblo, o de la sociedad, o de la democracia o del welfare state.
Pero lo cierto es que hoy, existen muy pocos países donde hay historia
de experiencias democráticas verdaderas, aquellas pensadas para el bienestar
general, ellas son el faro, debemos buscar modelos y superarlos con mas
compromiso, más participación, estar vigilantes. Y si los gobiernos y las
administraciones públicas están a la altura de querer ser un ejemplo digno de
cambio y mejora en pos del conjunto de la sociedad entonces sí podremos tener
una convivencia real, hasta entonces debemos seguir en su búsqueda.